"Los acuerdos entre Calderón y la CONCAMIN para “congelar” los precios de 150 artículos alimenticios es una broma de mal gusto que demuestra la ignorancia y falta de sentido común del gobierno federal y quien lo encabeza".
Por: Carlos Infante López
La historia en México se repite como aquel personaje que se tropieza con la misma piedra más de una ocasión.
Para aquellos que vivimos y sufrimos los errores de Luis Echeverría, López Portillo, (Jolopo), Salinas de Gortarí, no podemos más que comparar el manejo de la política monetaria de aquellos años con las sugerencias absurdas de Felipe Calderón. Sin embargo hay una diferencia fundamental, la autonomía otorgada al Banco de México como resultado de los desastres económicos en las décadas de los 70´s, 80´s y 90´s. Los acuerdos entre Calderón y la CONCAMIN para “congelar” los precios de 150 artículos alimenticios es una broma de mal gusto que demuestra la ignorancia y falta de sentido común del gobierno federal y quien lo encabeza. Los controles de precio no funcionan nunca, solamente provocan una distorsión perversa que la sociedad, excluyendo a Calderón y su círculo cercano que ya se protegieron económicamente, termina pagando con un menor nivel de vida.
La decisión de Banco de México de aumentar la tasa de interés en 0.25 puntos es una medida sensata que disminuye el riesgo de una inflación mayor, efecto perverso para mantener una economía estable. Calderón mostró su ignorancia cuando en días pasados le “sugirió” a Banco de México que hiciera lo contrario, es decir, disminuir la tasa de interés. Guillermo Ortiz, el gobernador del banco central mexicano, mantuvo un silencio inteligente y no contamino su decisión por presiones políticas e ignorantes. La inflación está afectando a todo el mundo, México no se puede sustraer a este fenómeno porque cualquier burócrata declare que el país está blindado, puras palabras.
La política fiscal si está en manos del gobierno federal, que logra que el Congreso le apruebe una reforma impositiva que solamente busca recaudar, no estimular la actividad económica, otro yerro de Calderón. El mejor ejemplo es la cantidad de amparos promovidos contra el IETU, (Impuesto Empresarial a Tasa Unica), pero con una Suprema Corte de Justicia que no se atrevió a tocar al pederasta gobernador del estado de Puebla, el IETU será considerado constitucionalmente válido porque sus las decisiones de la Corte son políticas, no jurídicas. ¿Y el país? Bien gracias.
Foto: Banco de México
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