Gringos go home Por: Carlos Infante
Colaborador
Hace algunos años, por un programa estadounidense, me entere de la colonización de los gringos de toda la península de Baja California. Asentamientos localizados a lo largo de las paradisíacas costas. Al ir escuchando el reportaje, poco a poco, mi indignación creció, ya que es ilegal, inconstitucional que cualquier extranjero se asiente en las costas nacionales, específicamente “50 kilómetros de la costa y a 100 kilómetros de la frontera” (art. 27 constitucional). El día de hoy una vez más me siento indignado, ya que el número de esta semana de la revista Proceso (No. 1647) trata el tema y lo que ahí relata es aun más indignante. No sólo los gringos se han establecido en Baja California, sino que prácticamente se están adueñando de la península. Las playas ahora son de propiedad privada, muchos lugares donde trabajaban los pescadores ahora están prohibidos y los nombres de muchos lugares son cambiados por los gringos porque no les gustan sus nombres. Lo más triste de todo esto es que los gobiernos tanto locales como el estatal están permitiendo esto, ya que es un negocio redondo. Además todos estos gringos son técnicamente ilegales, pero nuestras débiles leyes permiten que estas personas no tengan que responder a las autoridades migratorias. Muchas de las empresas dedicadas a la construcción y bienes raíces trabajan también de manera ilegal, pero ayudadas y protegidas por el mismo gobierno, una gran red de complicidades.
Es importante notar que no sólo los gringos han entrado al negocio de la colonización, sino que también algunas empresas canadienses y hasta empresarios mexicanos, al igual que los españoles, pero son los gringos los que dominan el mercado.
Hemos oído en todos los discursos políticos que México es un país libre y soberano, pero la soberanía se está perdiendo, ya que estos extranjeros han decidido apropiarse de las dos Baja Californias. Sin darnos cuenta estos dos estados se esta volviendo una extensión de Estados Unidos y no nos sorprendamos que pase lo mismo que paso con California, Texas, Nuevo México y Arizona y se vuelvan los estados 51 y 52 ó sólo el estado 51 de la unión americana.
Si los gringos defienden tanto su frontera de nuestros ilegales, deportándonos, arrestándonos y tratándonos con la punta del pie; es justo que nosotros hagamos lo mismo, ya que es nuestro país y tenemos que defender nuestra frontera y nuestro territorio. Claro que esto no va pasar, y el gobierno federal no va a hacer nada. ¡No, mejor sigamos permitiendo que nuestros compatriotas siguan cruzando la frontera y empecemos a tomar todo lo que los gringos posean. Si ellos lo hacen, porque no nosotros: eso es justicia.
Video Promocional estadounidense de "Loreto Bay", Baja California, México
Colaborador
Hace algunos años, por un programa estadounidense, me entere de la colonización de los gringos de toda la península de Baja California. Asentamientos localizados a lo largo de las paradisíacas costas. Al ir escuchando el reportaje, poco a poco, mi indignación creció, ya que es ilegal, inconstitucional que cualquier extranjero se asiente en las costas nacionales, específicamente “50 kilómetros de la costa y a 100 kilómetros de la frontera” (art. 27 constitucional). El día de hoy una vez más me siento indignado, ya que el número de esta semana de la revista Proceso (No. 1647) trata el tema y lo que ahí relata es aun más indignante. No sólo los gringos se han establecido en Baja California, sino que prácticamente se están adueñando de la península. Las playas ahora son de propiedad privada, muchos lugares donde trabajaban los pescadores ahora están prohibidos y los nombres de muchos lugares son cambiados por los gringos porque no les gustan sus nombres. Lo más triste de todo esto es que los gobiernos tanto locales como el estatal están permitiendo esto, ya que es un negocio redondo. Además todos estos gringos son técnicamente ilegales, pero nuestras débiles leyes permiten que estas personas no tengan que responder a las autoridades migratorias. Muchas de las empresas dedicadas a la construcción y bienes raíces trabajan también de manera ilegal, pero ayudadas y protegidas por el mismo gobierno, una gran red de complicidades.
Es importante notar que no sólo los gringos han entrado al negocio de la colonización, sino que también algunas empresas canadienses y hasta empresarios mexicanos, al igual que los españoles, pero son los gringos los que dominan el mercado.
Hemos oído en todos los discursos políticos que México es un país libre y soberano, pero la soberanía se está perdiendo, ya que estos extranjeros han decidido apropiarse de las dos Baja Californias. Sin darnos cuenta estos dos estados se esta volviendo una extensión de Estados Unidos y no nos sorprendamos que pase lo mismo que paso con California, Texas, Nuevo México y Arizona y se vuelvan los estados 51 y 52 ó sólo el estado 51 de la unión americana.
Si los gringos defienden tanto su frontera de nuestros ilegales, deportándonos, arrestándonos y tratándonos con la punta del pie; es justo que nosotros hagamos lo mismo, ya que es nuestro país y tenemos que defender nuestra frontera y nuestro territorio. Claro que esto no va pasar, y el gobierno federal no va a hacer nada. ¡No, mejor sigamos permitiendo que nuestros compatriotas siguan cruzando la frontera y empecemos a tomar todo lo que los gringos posean. Si ellos lo hacen, porque no nosotros: eso es justicia.
Video Promocional estadounidense de "Loreto Bay", Baja California, México
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Página web de Loreto real estate
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