Tal parece que esta cita, expresada por el escritor inglés George Orwell, en su novela emblemática “1984”, le siente bien a México. Hay que recordar que la novela de Orwell, hace una crítica a los regimenes totalitarios, en especial la soviética, y en la que describe el sometimiento de la sociedad bajo ese modelo de gobierno. Esto no significa que México este bajo un régimen de este tipo, sin embargo, la cita de Orwell expresa claramente el porqué México y el resto de los países en vías de desarrollo no pueden lograr superar la etapa de los pañales y pasar a la etapa de maduración. En el caso de México, un país rico en recursos naturales y siendo la catorce economía más grande del mundo, no pueda dejar de ser un país de pobres y exportador de éstos.
Todos sabemos que para poder combatir todo esto y ser más competitivos en un mundo globalizado, se necesita de un pueblo educado. En los últimos años México ha ubicado en los últimos lugares en la evaluación de calidad educativa realizada por la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), sin embargo, tal parece que al ejecutivo no parece importarle mucho, pues no habido cambios sustanciales respecto a la pésima calidad de nuestro sistema educativo. El gobierno del presidente Calderón hizo el tan mencionado examen “Enlace”, con la finalidad de poder detectar las deficiencias de los alumnos, como si la evaluación de la OCDE no les dijera nada. Me llamó la atención unos datos publicados el lunes pasado en el periódico El Universal, en la que revela que 45.5% de los estudiantes que ingresaron a la secundaria a mediados del sexenio de Vicente Fox, no lograron pasar al bachillerato. Las razones son múltiples, por reprobación; falta de interés por el estudio; la situación socioeconómica del estudiante, pero también hay que añadir la las pésimas condiciones de las aulas; deficiente preparación y condiciones laborales deplorables de muchos profesores; y sobre todo un método de enseñanza arcaica, que se basa en la memorización y sin la posibilidad de que tengan acceso a materiales de apoyo y a las nuevas tecnologías. Ahí esta la tarea ¿que tan difícil es invertir en la educación que es el pilar del desarrollo del hombre, para que éste pueda aportar sus capacidades y habilidades en pro del desarrollo del país? La lentitud con que se mueve el gobierno y las autoridades correspondiente para reformar el sistema educativo, parece indicar que no tienen mucho interés por tener un país educado y productivo, pues entre más ignorantes sea sus gobernados mayor poder podrán acaparar.
EquisY Radio
Todos sabemos que para poder combatir todo esto y ser más competitivos en un mundo globalizado, se necesita de un pueblo educado. En los últimos años México ha ubicado en los últimos lugares en la evaluación de calidad educativa realizada por la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), sin embargo, tal parece que al ejecutivo no parece importarle mucho, pues no habido cambios sustanciales respecto a la pésima calidad de nuestro sistema educativo. El gobierno del presidente Calderón hizo el tan mencionado examen “Enlace”, con la finalidad de poder detectar las deficiencias de los alumnos, como si la evaluación de la OCDE no les dijera nada. Me llamó la atención unos datos publicados el lunes pasado en el periódico El Universal, en la que revela que 45.5% de los estudiantes que ingresaron a la secundaria a mediados del sexenio de Vicente Fox, no lograron pasar al bachillerato. Las razones son múltiples, por reprobación; falta de interés por el estudio; la situación socioeconómica del estudiante, pero también hay que añadir la las pésimas condiciones de las aulas; deficiente preparación y condiciones laborales deplorables de muchos profesores; y sobre todo un método de enseñanza arcaica, que se basa en la memorización y sin la posibilidad de que tengan acceso a materiales de apoyo y a las nuevas tecnologías. Ahí esta la tarea ¿que tan difícil es invertir en la educación que es el pilar del desarrollo del hombre, para que éste pueda aportar sus capacidades y habilidades en pro del desarrollo del país? La lentitud con que se mueve el gobierno y las autoridades correspondiente para reformar el sistema educativo, parece indicar que no tienen mucho interés por tener un país educado y productivo, pues entre más ignorantes sea sus gobernados mayor poder podrán acaparar.
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